EE.UU-. ( AGENCIALAVOZ.COM ) Más de cuatro mil cristianos se reunieron en Washington, la semana pasada, en la cuarta conferencia anual de Cristianos Unidos por Israel, demostrando su pasión por el Estado judío.
Durante dos días, los participantes aprendieron sobre el país, su historia, el conflicto palestino-israelí, la forma de defender a Israel de manera efectiva, lo que debería hacer el gobierno de los Estados Unidos, cómo tratar con Irán y cómo operar los grupos de presión. Los participantes se reunieron con sus diputados y senadores electos en el Congreso para expresar su apoyo a Jerusalén.
“Estamos aquí para decirle que hay 50 millones de cristianos en esta nación que lo apoyan a usted y al Estado de Israel”, dijo el fundador de CUFI, John Hagee (foto), al primer ministro, Biniamín Netanyahu, que se unió a la conferencia vía satélite.
“Su inquebrantable amistad nos fortalece”, expresó Netanyahu, señalando que el grupo está ayudando a un nuevo capítulo en las relaciones judeo-cristianas.
Dentro de la comunidad judía, existe discrepancia sobre cómo hacer frente a este apoyo. Fundada en 2006, CUFI ahora reclama más de 220.000 seguidores en todo los EE.UU.
Temas recurrentes planteados por la mayoría de los oradores de la conferencia fueron los numerosos aspectos del derecho de Israel a existir y expandirse, la sensación de que la administración de Obama injustamente presiona al gobierno a detener la expansión y una necesidad urgente para hacer frente a Irán.
Malcolm Hoenlein, vicepresidente ejecutivo de la Conferencia de Presidentes de Grandes Organizaciones Judías de Norteamérica, se unió a las críticas a la política del presidente, Barack Obama, sobre Oriente Medio Oriente. Dijo que no creía en la teoría que la siembra de discordia entre EE.UU. e Israel dará legitimidad a Washington para negociar con algunos de los Estados árabes.
“El apoyo a Israel en Estados Unidos creo que ha sido tan fuerte, en gran medida, porque los estadounidenses han sido tan pro-Israel que no se atreven a dejar que la relación se erosione”, expresó el Director Ejecutivo de CUFI, David Brog.
En la Noche de Honor al Estado judío, el senador Joseph Lieberman recibió el Premio Defensor de Israel. “Este convención es un milagro. Es todo de ustedes que son los más importantes defensores de Israel”, concluyó el senador.
El embajador a los EE.UU., Michael Oren, y el ministro de Turismo, Stas Meseznikov, expresaron sentimientos similares en sus comentarios.
Israel está tratando de llegar a la Comunidad Cristiana con el establecimiento de un grupo de trabajo del primer ministro para relaciones mundiales cristianas, en el que participará Hagee.
Durante dos días, los participantes aprendieron sobre el país, su historia, el conflicto palestino-israelí, la forma de defender a Israel de manera efectiva, lo que debería hacer el gobierno de los Estados Unidos, cómo tratar con Irán y cómo operar los grupos de presión. Los participantes se reunieron con sus diputados y senadores electos en el Congreso para expresar su apoyo a Jerusalén.
“Estamos aquí para decirle que hay 50 millones de cristianos en esta nación que lo apoyan a usted y al Estado de Israel”, dijo el fundador de CUFI, John Hagee (foto), al primer ministro, Biniamín Netanyahu, que se unió a la conferencia vía satélite.
“Su inquebrantable amistad nos fortalece”, expresó Netanyahu, señalando que el grupo está ayudando a un nuevo capítulo en las relaciones judeo-cristianas.
Dentro de la comunidad judía, existe discrepancia sobre cómo hacer frente a este apoyo. Fundada en 2006, CUFI ahora reclama más de 220.000 seguidores en todo los EE.UU.
Temas recurrentes planteados por la mayoría de los oradores de la conferencia fueron los numerosos aspectos del derecho de Israel a existir y expandirse, la sensación de que la administración de Obama injustamente presiona al gobierno a detener la expansión y una necesidad urgente para hacer frente a Irán.
Malcolm Hoenlein, vicepresidente ejecutivo de la Conferencia de Presidentes de Grandes Organizaciones Judías de Norteamérica, se unió a las críticas a la política del presidente, Barack Obama, sobre Oriente Medio Oriente. Dijo que no creía en la teoría que la siembra de discordia entre EE.UU. e Israel dará legitimidad a Washington para negociar con algunos de los Estados árabes.
“El apoyo a Israel en Estados Unidos creo que ha sido tan fuerte, en gran medida, porque los estadounidenses han sido tan pro-Israel que no se atreven a dejar que la relación se erosione”, expresó el Director Ejecutivo de CUFI, David Brog.
En la Noche de Honor al Estado judío, el senador Joseph Lieberman recibió el Premio Defensor de Israel. “Este convención es un milagro. Es todo de ustedes que son los más importantes defensores de Israel”, concluyó el senador.
El embajador a los EE.UU., Michael Oren, y el ministro de Turismo, Stas Meseznikov, expresaron sentimientos similares en sus comentarios.
Israel está tratando de llegar a la Comunidad Cristiana con el establecimiento de un grupo de trabajo del primer ministro para relaciones mundiales cristianas, en el que participará Hagee.
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