El SEÑOR RESUCITO Y TU

martes, 4 de agosto de 2009


Por: Edgardo Rodríguez Engelhard


NICARAGUA-. ( AGENCIALAVOZ.COM ) Me gusta este tema por que debiera ser nuestra vida diaria, pero a menudo no lo es; es importante conversar sobre el seguimiento de JESUS y ver como esto se va dando en nuestro diario vivir, lo cual es un proceso permanente de conversión.
Que implica un morir poco a poco para que sea EL que vaya naciendo, creciendo y viviendo a través de nosotros.


Me llama mucho la atención la narración de lo acontecido a los discípulos de Emaus se parece a nuestra propia vida; Lucas 24:15 dice: sucedió que mientras hablaban y discutían entre si, Jesús mismo se acerco y caminaba con ellos”.
Seguir al SEÑOR implica como verlo caminando; el va delante de nosotros, a menudo,
No lo reconocemos, su verdadero seguimiento significa reconocer su señorío lo cual es un proceso que habremos de terminar como decía alguien, media hora después de muertos, pero una vez comienzas, es practimente imposible dejar su caminar, siempre es hasta el final.
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En este caminar a veces podemos extraviarnos, perderlo de vista un rato pero en el fondo sabemos que el siempre esta allí para nosotros Jesús dijo “todo aquel que venga a mi yo lo recibiré, no hay requisitos solo hay que buscarlo.
En una ocasión El Señor le dijo a sus discípulos que debían comer de su carne y beber de su sangre y se escandalizaron y contestaron dura cosa pides Señor y la gran mayoría se fue, lo abandonaron, y volvió de nuevo el Señor a los doce y les pregunto “ y ustedes no se van a ir también “y Pedro siempre Pedro le contesto “adonde vamos a ir maestro si solo tu tienes palabras de vida eterna, que no vamos a hallar en nada ni en nadie lo Jesús nos da.

A mi querido lector me ha dado todo sentido de vivir, antes yo era un hombre al nada le daba una satisfacción permanente ,siempre andaba en la búsqueda, no tenia paz, vivía en una lucha permanente por lograr cosas, propósitos a menudo de negocios y después en el ámbito político ,deportivo etc. pero siempre iba en busca de mas de otra cosa, con tanta prueba que he pasado en mi vida de 25 años buscando al señor ,el me ido moldeando mi carácter mejorando en todas las áreas enseñándome de manera especial tratar de ser manso y humilde como EL; lo sabemos es muy difícil pero lo sigo intentando cada día.
Ahora caminar con EL este otro gran privilegio a que EL nos invita no es fácil, caminar con EL yo lo veo mas bien como nuestro diario vivir, con la gente.

Me sucedió hace poco conversaba brevemente con un conocido de negocios cuyo nombre es Miguel, le pregunte como estaba y me respondió que mal que su esposa lo había dejado por otro y deseaba morir se sentía enfermo.
Para mi fue impactante oír eso y no reaccione en el momento pero en mi corazón empecé a orar por el y continué mi camino; Dios tuvo la misericordia de ponérmelo enfrente y a solas y lo llame y ore por el y recibió al Señor en su corazón lo cual cambio su vida, después le llame de nuevo y miguel era hombre nuevo.
Cuantas veces hermanos nos encontramos con el Señor en el día a día y no lo reconocemos, como los discípulos , el camina a nuestro lado con la familia los amigos los pastores los sacerdotes los ancianos los niños sin hogar los desamparados los abusados, los secuestrados toda la humanidad entera que no conoce al Señor todos son los pequeños del Señor, pidamos al espíritu santo que abra nuestros ojos que nos de un corazón como el de el compasivo misericordioso, perdonador, manso y humilde y entonces veras al Señor partiendo el pan y nunca mas volverás a tener hambre y sed .
Hoy haz como los discípulos de Emaús, si ya caminaste con EL sin darte cuenta pero, El Señor se revelo compartiendo el pan de vida contigo, no lo dejes pasar, invítalo a entrar en tu vida a tu casa a tu familia a tus negocios, a tu país pídele que se quede y al igual que aquellos discípulos el se quedara y partirá el pan pera ti y después una vez mas te dirá SIGUEME.