Foto: ( Santana es promotor de la legalización de la drogas, aquí lo vemos saludando con el símbolo del cuerno )
Por José Linares Cerón
PERU-. ( AGENCIALAVOZ.COM ) Los líderes de mi ministerio me aconsejaron no firmar con mi nombre este tema, pero yo siempre les digo: “Para mí el vivir es Cristo y el morir es ganancia”. Filipenses1:21. Así como van las cosas en el movimiento de derechos civiles pro- vida y familia, tendremos que salir con un mensaje más claro en nuestras movilizaciones en defensa de nuestra familia como el rechazo rotundo a la no legalización de la droga en nuestros países.
¿Quiénes se benefician con la legalización de las drogas?
Las industrias farmacéuticas, los carteles del narcotráfico, entre otros. Durante casi un mes, el mercadeo de legalizar las drogas ha movilizado la atención de la prensa, en su mayoría respaldando la medida. Las ONG fachadas de la industria de las drogas financian todo esta actividad de mercadeo publicitario. Al parecer nadie de los ilustres líderes de opinión ha mencionado que la legalización de la droga en Holanda es un fracaso total. La causa: la epidemia de adicciones que han surgido como resultado de poner al alcance de todas sustancias que modifican ampliamente la conducta humana. De 1984 a 1996, el uso de drogas en adolescentes holandeses aumentó 200 por ciento, mientras que en Estados Unidos en ese mismo periodo, la tasa se redujo en más del 50 por ciento. Las mismas autoridades atribuyen el 65 por ciento del aumento en el crimen juvenil al uso de estas drogas. Los promotores de la legalización dicen que las drogas legales, alcohol y tabaco, matan mucha más gente que las drogas ilícitas, y es cierto. Pero no mencionan que eso es en un contexto de prohibición. Si se legalizaran, la mortalidad crecería enormemente.
Estas sustancias alteran gravemente la conducta
Es ingenuo pensar que un narcotraficante, que se ha dedicado al delito buena parte de su vida, se convertirá en un respetable hombre de negocios o que, al menos, dejará su actividad ilegal. Si todas las drogas no se legalizan absolutamente para todos con el mismo precio, el esquema fracasará. Si no se legalizan para los niños, o no se legalizan las mal llamadas drogas duras, entonces no faltarán delincuentes que se las vendan. Y el esquema, insisto, fracasará en ese caso en su faceta de inhibir al narcotráfico, porque la epidemia de adicciones y toda la mortalidad relacionada con la droga, ahí estaría. Las drogas son sustancias que deben permanecer prohibidas, ya que si se aumenta su disponibilidad, más jóvenes y niños pueden caer en la adicción.
He leído comunicados de entidades religiosas desconocidas en algunos países de América latina y España en apoyar esta medida. A mí no me sorprenden, los llamados religiosos el pasado octubre, Carlos Santana había declarado que deseaba dirigir una iglesia como pastor evangélico en Hawái y ahora quiere legalizar la marihuana. El futuro pastor religioso dijo: “… Legalicemos la marihuana y con el dinero hagamos inversiones en desarrollo y educación. América se transformará entonces…” Santana también dijo estar convencido de que un mercado legal de marihuana ayudaría a revitalizar la deprimida economía y crearía puestos de trabajo.El comentario de Santana es inmadura y fuera de contexto. Nosotros lo creyentes renacidos por el poder de su nombre. Si creemos que Dios cambia vidas. ¿Y por que las autoridades no desarrollan un trabajo conjunto con las entidades no católicas?. Denle la oportunidad y verán los cambios. ¿Qué opina? Escríbeme: info@coalicionpresencia.com
El Pastor José Linares Cerón, Presidente Coalición Presencia Internacional y preside el Ministerio oración Internacional entre otras organizaciones.